Publicado en El Siglo

CONSERVANDO EL PASADO

Por Mariela Sagel, en El Siglo, 30 de agosto de 2021.

En estas tierras, donde hace casi cien años reinaba el Imperio Otomano y por donde pasaron todas las dinastías que fueron conformando el mundo, se tiene gran respeto por la historia y sus vestigios.

     Acabo de estar, por invitación del gobierno turco, en un sitio poco conocido por los turistas, pero que recoge siglos de historia, en la provincia de Bitlis, al lado del lago de Van, un grandísimo lago salado de origen volcánico que tiene propiedades medicinales.  En el lago hay cuatro islas, en una de las cuales se erige una joya de arquitectura medieval armenia, la catedral de la Santa Cruz.  Con unas elaboradas fachadas que representan los evangelios, los santos, profetas, los animales y las leyendas, fue descubierta, ha sido estudiada y analizada hasta la saciedad y motivo de gran admiración en el mundo.

     La iglesia tiene en la cúpula y todas sus paredes interiores pintadas al fresco, que también ha sido restaurado apegándose estrictamente al estilo en que fue construida y sus alrededores, la ciudadela donde estuvo, conservada para el disfrute de los visitantes.

     Visitamos cementerios, donde cada tumba tiene un cuento tallado en su lápida y también los típicos castillos que custodiaban las ciudades.  Y todos estos monumentos, su señalización, limpieza, mantenimiento y preservación, son mantenidos por el ayuntamiento de cada ciudad y por el Ministerio de Cultura y Turismo.

     Creo que uno podría pasarse la vida entera viviendo aquí y no terminaría de descubrir todas las bellezas que ofrece, no solo naturales, sino históricas, a las que se puede llegar por excelentes y bien señalizadas carreteras, porque otro super ministerio es el de Transporte e infraestructura.

     La conectividad aérea también es magnífica y uno puede trasladarse a todos estos lugares mediante aviones comerciales que aterrizan en bien instalados aeropuertos, con decoraciones alusivas a los diseños de las artes decorativas turcas.

     No hay que organizar patronatos para preservar el pasado, el estado es responsable de ello y lo hace con gran acierto.