En mayo próximo el popular cantautor español Joaquín Sabina se presentará por primera vez en Panamá, en el Teatro Anayansi. Será una ocasión única, épica, mítica e irrepetible para el autor de Y nos dieron las diez , una canción que muchos entonan a voz en cuello, y que ha vendido millones de discos alrededor del mundo.
Con el título de ‘500 noches para una crisis’, el recital marca la conmemoración de los 15 años del importante álbum ‘19 días y 500 noches’.
DE MONJE A POETA MALDITO DE LA CANCIÓN
El pasado 12 de febrero Sabina celebró 66 años de vida. El compositor nació en 1949 en Ùbeda, donde estudió con las monjas Carmelitas y los sacerdotes Salesianos, en una época en la que escribía versos y leía a Fray Luis de León, Jorge Manrique y José Hierro, mezclados con Proust, Joyce y Marcusse.
Dentro de un grupo de adolescentes que imitaban a Elvis, Chuck Berry y Little Richard, el joven Joaquín formó su primera banda llamada Merry Youngs. Más tarde, se graduó de la Universidad de Granada en Filología Románica y colaboró en la revista Poesía 70 .
Después de que su padre lo mandara a encerrar por haberse convertido en un político contestatario, se mudó a Londres, donde comenzó a escribir sus primeras canciones. Colaboró con el Club Antonio Machado, uno de los centros frecuentados por emigrantes y exiliados, y montó polémicas obras teatrales como ‘La excepción de la regla’, de Bertol Brecht y ‘El cepillo de dientes’, de Jorge Díaz.
En 1975 publicó el libreto de canciones ‘Memorias del exilio’, y comenzó a abrir conciertos para Paco Ibañez, Lluís Llach, Pi de la Serra y Elisa Serna, ante la colonia de exiliados ingleses, para más tarde producir la banda sonora de la serie ‘The last crusade’. Más tarde editó Inventario , su primer disco, y en 1979 comenzó a cantar en el café ‘La Mandrágora’, junto a Javier Krahe y Alberto Pérez. Al lugar acudió Fernando García Tola y los invitó a su programa ‘Esta Noche’.
Luego de trabajar varios años para la CBS , Sabina editó Malas compañías y Juez y Parte , y estrenó Si te he visto no me acuerdo . Pronto consolidó su éxito con la venta de 400 mil copias de ‘Hotel, dulce hotel’ e inició una gira por México, Argentina y Venezuela, para presentar ‘El hombre del traje gris’, que fue incluido en la banda sonora de la película Sinatra , de Francesc Betríu.
Antes de presentar el álbum Mentiras piadosas , durante la Guerra del Golfo Pérsico, Sabina escribió, junto a otros artistas e intelectuales en el ‘Diario por la paz’. En los 90 produjo los álbumes Física y Química , Sacrificio de Dama , Esta boca es mía y Yo, mí, me, contigo , material que vendió 80 mil copias en su primera semana en el mercado.
Las giras se incrementaban. Llegó a tocar hasta 30 conciertos en compañía de Los Rodríguez. Durante la gira ‘Sabina, viuda e hijos, en paños menores’, el español recuperó la tradición folk de los días de La Mandrágora , ganando el galardón al ‘Mejor autor pop rock’ en la primera edición de los Premios de la Música de España.
En 1999 publicó 19 días y 500 noches , disco del cual se vendieron más de medio millón de copias en España y que le hizo ganar cuatro de los Premios de la Música de la SGAE 2000, además del de ‘Ondas 2000’ a la mejor canción. En 2002 aparecieron Con buena letra , recopilación de sus letras e ilustraciones y el disco Dímelo en la calle , considerado por la crítica como uno de los álbumes más importantes de ese año, y que se dio a conocer con el disco 69 punto G .
Con varios años de trayectoria a cuestas, la creatividad del cantautor le permitió editar Diario de un Peatón , álbum con un fondo tecno, cuya letra está basada en dos sonetos suyos, y que además incluyó A vuelta de correo , tema inédito, y una pista multimedia con el video de ‘69 punto G’.
En 2003 se reeditó Malas Compañías , Ruleta Rusa y el mítico La Mandrágora , que fueron incluidos en Parece que fue ayer , una recopilación de los primeros trabajos del músico español. Después saldría a la venta Motivos de un sentimiento, el álbum del ‘Himno del Centenario’ del Atlético de Madrid.
El 2004 sería un año muy ocupado para el cantautor, pues participó como invitado en numerosas producciones: ¡Qué grande es esto del amor! , del grupo Café Quijano, Neruda en el corazón , Ciudad naufragio , Y todo es vanidad , homenaje a Javier Krahe, entre otras.
También se estrenó como crítico en la columna semanal ‘Esta boca es mía’, para la revista Interviú , y en cine participó en la película Isi & Disi , dirigida por Chema de la Peña, con la canción ‘La Rubia de la Cuarta Fila’.
Ese mismo año creó con unos socios el restaurante ‘La cantina de la Mordida’ en Madrid, España. Asimismo, participó en el Festival Mexicano de la Palabra y editó otro material recopilatorio: Todos hablan de ti .
SABINA Y AMIGOS
A partir del 2007 Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina realizaron múltiples giras presentando dos conciertos titulados ‘Dos pájaros de un tiro’ y ‘Dos pajarracos contraatacan’, que fueron verdaderamente irrepetibles en las vidas de ambos cantautores, que se respetan y admiran mutuamente, el uno por sobrio y comedido, el otro por irreverente y atrevido.
Unieron la lírica del nano con el desgarro del flaco y protagonizaron conciertos inolvidables en España, México, Colombia, Ecuador, Perú, Argentina, Uruguay y Venezuela.
Durante la realización de estas presentaciones era común ver a uno interpretando canciones del otro. El ejercicio, que duró más de tres años, contribuyó a blindar la amistad de ambos. En diciembre pasado Joaquín Sabina estuvo en el homenaje que los premios Grammy le ofrecieron a Serrat en Las Vegas, participando así mismo en su Antología Desordenada , un álbum de 4 CD’s que acaba de sacar a la venta el autor catalán, donde interpreta canciones con un montón de artistas, entre ellos con Rubén Blades, Silvio Rodríguez, Pablo Milanés, Mercedes Sosa y muchos otros.
UNA CULTURA SOBRESALIENTE
Más allá de su fama de bohemio, mujeriego y trasnochador irredento, Sabina posee una cultura que rivaliza con la de cualquier intelectual que se respete. Voraz lector y consumidor de obras literarias como novelas y poesías, goza de una rebelde madurez que lo lleva a componer canciones que son poemas, y poemas que se convierten en canciones.
En cada lugar donde se presenta tiene una deferencia para algún personaje local, y es así que en Chile brindó por Antonio Skármeta, el escritor que acababa de recibir el Premio Nacional de Literatura, y le cantó a Violeta Parra, a Neruda y al centenario de Nicanor Parra, que cumplía por esos días.
En Buenos Aires se siente como en su casa, refiriéndose al fútbol y personajes como Maradona, desde el Luna Park, donde sus conciertos son concentraciones de personas que lo veneran. La primera vez que se presentó junto a Serrat en México, Gabriel García Márquez estaba entre los asistentes, y le dedicaron en conjunto la canción ‘Contigo’. En sus canciones también hace mención a Frida Kahlo y Diego Rivera.
Precisamente, el álbum que saldrá a la venta el próximo tres de marzo fue filmado en el Luna Park, de Buenos Aires. Tal como se propuso desde el año pasado, cuando se cumplieron 15 años de haber compuesto y sacado al mercado ‘19 días y 500 noches’, el vocalista revivirá todas esas experiencias con su concierto ‘500 noches para una crisis’. Aquí no vamos a esperar 500 noches, vamos a verlo en vivo y en directo en menos de 90 noches en el Teatro Anayansi, el 28 de mayo.
