MARIELA SAGEL
El Siglo, 16 de abril de 2012
La semana pasada escribí sobre las migraciones hostiles que uno tiene que enfrentar cuando viaja, pues estaba visitando a mi hija que vive en Canadá. Si bien señalé que para muchos es engorroso y caro el trámite que se tiene que hacer para obtener una visa que le permita conocer ese vasto país, el segundo en extensión territorial después de Rusia, los servicios de Migración, una vez se llegue a territorio canadiense, son muy amables y expeditos.
En Canadá existe la modalidad que se ha implantado en otros países, la de tener un Departamento de Migración y Aduana dentro de los mismos predios del aeropuerto internacional del que uno salga. Para nosotros los panameños eso sería como volver a revivir la Zona del Canal, pero no es lo que parece. Cuando uno se embarca en un aeropuerto internacional canadiense, y tiene que hacer una conexión de avión en los Estados Unidos, todo el trámite se hace de una vez y tanto el equipaje como los papeleos se hacen allá, el resto del viaje no hay que preocuparse. Los funcionarios de esos departamentos de Estados Unidos son cordiales y eficientes, nada comparable a la hostilidad que se siente cuando uno llega a Miami, especialmente, donde el maltrato y las largas filas son la tónica. Como hay que pasar Aduanas allí, se corre el riesgo de perder el siguiente vuelo por el congestionamiento, la demora y, sobre todo, la hostilidad. Comentando estos temas con mi familia, me señalaban que era muy probable que los funcionarios de Migración, reflejando la grave situación económica y el desempleo que atraviesa ese país, sientan que uno les viene a quitar el empleo.
Es posible que se perciba que la salida es más amable porque, a fin de cuentas, nos están diciendo ‘tatái’, pero bien harían las autoridades aeronáuticas en evaluar la posibilidad de hacer un enclave en aeropuertos internacionales para que, haciendo los trámites de Aduana y Migración de Estados Unidos, no nos traten como si fuéramos inmigrantes ilegales. A lo mejor en un estudio sobre tráfico aéreo, los volúmenes de y hacia Colombia sean mayores, pero bien valdría la pena aprovechar la privilegiada posición de ‘hub de las Américas’ que tiene Tocumen para ser ejemplo de eficiencia.
Creo recordar que el Ministro de Seguridad había dicho que se establecería un acuerdo como el que señalo, pero como al ministro no se le puede creer ni la renuncia, vale la pena evaluar ser más eficientes en la entrada y salida de pasajeros.