Publicado en El Siglo

RESPONSABILIDADES SEGÚN EL CARGO

Por Mariela Sagel, en El Siglo, 4 de octubre de 2021.

Los puestos de trabajo, tanto privados como públicos, tienen responsabilidades inherentes las que deben cumplirse para que sean sostenibles y razón de ser.  Por ejemplo, un visitador médico tiene que hacer visitas a los médicos, por más incómodo que les parezca a los pacientes que están a la espera en la consulta al igual que él.  El camionero tiene que agarrar camino a la hora que sea y a donde tenga que llevar su mercancía, al igual que los cantantes deben trasladarse al lugar de las presentaciones, les guste o no.

     Lo mismo pasa con los funcionarios de gobierno.  El ministro de Agricultura tiene que recorrerse el país de cabo a rabo para ver lo que está sucediendo en cada rincón, y lo mismo el de Salud, el de Educación, pues es su responsabilidad no solo el estar al tanto de los centros tanto sanitarios como educativos, sino de las necesidades y las condiciones de dichos centros y de sus empleados directos.

     Los que trabajan en Sinaproc, los bomberos, la misma policía, tienen que enfrentar situaciones difíciles, a veces peligrosas, cuando se producen desastres nacionales, incendios o enfrentamientos y crímenes que los llevan a exponer hasta sus vidas.

     Ahora que estamos volviendo a la normalidad, por lo menos a los viajes, la ministra de Relaciones Exteriores ha hecho varios viajes, muy exitosos todos, a foros y países donde era necesario que la voz de los panameños se escuchara, así como lo hizo el presidente Cortizo ante la Asamblea de Naciones Unidas, y que reúne a todos los lideres mundiales.  La mayoría de las veces, los viajes nos hacen desprendernos de nuestras familias (en el caso de la señora Mouynes, con niños pequeños), de nuestros entornos y cumplir agendas que llevan al agotamiento.  Pero solamente dando la cara se logran las cosas, especialmente si son en beneficio del país.  Debemos sentirnos orgullosos, especialmente las mujeres, que estemos representadas al más alto nivel, por una mujer que ha dicho los que antes otros cancilleres no se han atrevido a decir y a la que respetan.