MARIELA SAGEL
Facetas, 4 de marzo de 2012
La undécima obra del periodista Jorge Ramos es una compilación de entrevistas, señaladas por el autor como incómodas, con aquellos que quieren llegar al poder y los que ya lo tuvieron
Jorge Ramos, el periodista mexicano que conduce el noticiero de Univisión, publicó el año pasado su undécimo libro, titulado Los Presidenciables, sobre los aspirantes a candidato a Presidente de México, país que tendrá elecciones en el mes de julio de este año. Es una compilación de entrevistas, señaladas por el autor como incómodas, con aquellos que quieren llegar al poder y los que ya lo tuvieron. Algunas de estas entrevistas fueron realizadas en formato de televisión para una serie homónima y le tocó al autor rescatarlas de sus archivos y editarlas. Tanto el libro como la serie perseguían conocer el pensamiento e intención de los posibles candidatos del Partido Revolucionario Institucional (PRI) —que por setenta años ostentó el poder, hasta el año 1999—, el Partido de Acción Nacional (PAN) —que lleva ya dos sexenios en la residencia de Los Pinos— y el Partido de la Revolución Democrática, colectivo fundado en 1989, que representa la tercera fuerza en su país y fue protagonista de un supuesto fraude en las últimas elecciones.
A estas alturas, ya se conocen los candidatos de dos de los tres partidos que competirán en las elecciones. El libro también incluye entrevistas con los ex presidentes Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo y Vicente Fox, a quienes Ramos radiografió en sus promesas electorales y su desempeño como mandatarios, así como con el actual presidente, Felipe Calderón, cuando era presidenciable.
EL DESTAPADO
Era usual, durante los gobiernos del PRI, que el presidente en oficio señalara a su sucesor, sin que mediara la decisión de sus copartidarios. Se le conocía como el gallo tapado y cuando se daba a conocer, era ‘el destapado’. Ahora en teoría se escoge de manera más democrática (dentro de un sistema genial de popularidad, sin gastar en primarias) y recientemente la selección recayó en Enrique Peña Nieto en contra de Manlio Fabio Beltrones, cuya entrevista también se incluye.
Un dato interesante que ofrece el libro, además de lo incisivo e incómodo de las preguntas del periodista, que ha ganado premios y ha sido señalado como uno de los 25 latinos más influyentes de Estados Unidos, es que describe la ropa que vestían sus entrevistados con dureza y sutileza, la impecabilidad de las uñas y hasta los calcetines que no le llegan a tapar un pedazo de pierna cuando la cruza. De igual forma, al primero de sus entrevistados lo ausculta desde el baño de su oficina personal, ese espacio íntimo que denota la personalidad del dueño, su mundo y permite humanizar a un personaje que a veces recibe tratos privilegiados. Yo hago lo mismo.
LOS PANISTAS Y LOS PERDEDORES
Vicente Fox, un ejecutivo de Coca-Cola que nunca abandonó su costumbre de vestirse con botas de vaquero, fue el candidato que rompió la hegemonía que tuvo el PRI desde el año 1919, y también fue quien decepcionó a toda la población que votó por él y a quien prometió un cambio. De ese partido había dos aspirantes relevantes, y ya se decidió por una mujer, Josefina Vásquez Mota, que de ganar, sería la primera mujer presidenta de ese país, muy machista de hecho. El otro aspirante era Santiago Creel, que también fue aspirante a la vez que el hoy presidente Felipe Calderón. Los retratos mordaces que hace Ramos de ambos los retratan en pocas palabras o en pocos párrafos, de manera muy puntual. Llama la atención que cuando conversa con la señora Vásquez le menciona las otras mujeres que han llegado a presidentas en sus países, mencionando a Nicaragua, Costa Rica, Argentina y Chile, obviando olímpicamente a Panamá.
En las últimas elecciones mexicanas el PRD tuvo de candidato a Andrés Manuel López Obrador, quien después de seis años insiste que fue el ganador y ha llevado a cabo una especie de gabinete en la sombra. Todo indica que para esta vuelta el ‘Peje’ va por la presidencia, en vez de su principal contendiente dentro del partido, Marcelo Ebrard, actual alcalde del Distrito Federal, a quien su relacionista público ponderó como el mejor alcalde del mundo (no sé contra quién compitió). Estoy segura que nuestro ex alcalde no participó en ese concurso.
Si se hiciera un libro en nuestro país para resumir los aspirantes a presidente, en el momento actual, sería una enciclopedia, y habría que venderla por fascículos. Solamente en un partido hay 11 aspirantes y en los otros dos que pueden llegar a algo, se perfilan más aspirantes que dirigentes.
Hace falta un Jorge Ramos que pueda disecar este fenómeno, pero sería un trabajo de hormiga poder compilar las opiniones y la trayectoria de cada uno de los aspirantes. Habría que reducirlo, como lo hace el periodista, a los que tienen más chance.