MARIELA SAGEL
El Siglo, 27 de Septiembre de 2010
La semana pasada dio mucho que hablar la decisión de invertir medio millón de dólares en restablecer un casi místico túnel que existe en Quarry Heights y que los entendidos dicen que abarca la base del Cerro Ancón. Para que no dejar de sorprendernos de las metidas de pata -porque esas sí están permitidas- del actual gobierno, el Ministro de la Presidencia les hizo un tour a los comunicadores para mostrarle esta instalación que no se utiliza desde que el último soldado salió de suelo patrio.
En cándidas declaraciones que vi en la televisión, el mismo funcionario justificaba tener acceso a un tipo de instalación casi blindada por asuntos de seguridad, ‘en caso que el consejo de gabinete’ tuviera que reunirse allí.
Tal uso es absolutamente ridículo. Es de todos sabido que el Canal es indefendible y que Quarry Heights está precisamente en su entrada del Océano Pacífico. Un tipo de infraestructura de este tipo, por las razones que fue construida, sería un atractivo turístico fascinante, donde se pudieran montar tanto exposiciones como amenidades, preservando precisamente el hecho para lo cual fue inicialmente concebida y hasta destacándolo.
Con la importancia que se le debe dar al turismo y tanto que se cacarea que es a lo que se debe apostar, instalaciones de este tipo, que puedan conjugar historia, cultura, arquitectura militar (que no hay mucha en Panamá) y muchas otras, pensar en un uso estrictamente gubernamental es descabellado. Todos saben que el Estado no destina presupuesto para el mantenimiento de sus bienes, por lo que este inmueble caería en el mismo marasmo en que se encuentran tantas oficinas de gobierno, con el agravante que por su ubicación, retiene mucha humedad. Darlo en concesión para que se desarrolle como complemento turístico al área del edificio de Administración y Mi Pueblito, sería una estupenda manera de ponerlo a funcionar para beneficio no solo de los que nos visitan, sino de todos los que tuvimos vedada su entrada desde que se creó la Zona del Canal.
Una recreación de lo que tuvieron que hacer muchos inmigrantes para cavar ese túnel, dentro de un cerro tan emblemático como el Ancón, podría ser muy atractivo para la oferta turística panameña. ¿Por qué no le señalamos al gobierno que deje de pensar en conspiraciones contra ellos y hagamos cosas más pro activas y edificantes?