Publicado en El Siglo

UN ANNUS HORRIBILIS

Mariela Sagel, en El Siglo, 27 de diciembre de 2021.             

     Traducido del latín como “año terrible”, se ha estado utilizando “annus horribilis” desde 1870 en el que la iglesia católica definió el dogma de la infalibilidad papal.  Pero realmente la expresión se volvió popular en 1992, en que la Isabel II, la reina más longeva actualmente, al cumplir 40 años en el trono, expresó su sentir ante todas las desgracias que tuvo ese año, a nivel personal.

     Y es que este año no nos ha dado tregua.  La pandemia sigue doblegándonos, cada vez con una nueva cara, y se nos han ido nuestros más cercanos seres queridos, hasta mascotas.  En lo personal, he sido sometida a operaciones y tratamientos, me he caído (pero también me he levantado) varias veces lo que me ha traído consecuencias de infiltraciones y terapias de recuperación, en fin, me ha pasado de todo.

     Pero al tiempo que despedíamos a amigos queridos, madres, perros y personalidades artísticas, teníamos alegrías.  Se casaron una sobrina en Boquete, un amigo en Tánger, –boda a la que asistí– hijos de amigos de toda la vida, nacieron bebés de los hijos de mis mejores amigos, y llegaron por primera vez becarios a Turquía, abriendo la trocha para que vengan más.

     No todo ha sido “horribilis”.  Me reencontré con muchos amigos tanto aquí como en otras partes del mundo, tuve muchas alegrías, también preocupaciones por mis allegados sometidos por el COVID sin mayores consecuencias, pero al final, tenemos optimismo, porque todo lo que empieza debe tener su fin, y porque a pesar de tantas pruebas para las que nadie en todo el mundo estaba preparado, seguimos vivos y con salud, con ganas de trabajar y echar para adelante el pequeño país del istmo donde nacimos, cada uno en su trinchera.

     Feliz año a todos los que me leen, los que me critican, los que se burlan de incógnito en los comentarios debajo de este texto y los que siguen siendo mis amigos.  Vacunémonos y seamos responsables en no exponernos a ser una cifra más en las estadísticas del COVID.